Hay algunas piezas del puzle del trading que, definitivamente, parecen no encajar nunca. Desde que hace ya unos cuantos años me interesé por el estudio de los Mercados, hay algunos aspectos contra los que topo violentamente. Temas [para mí] inabordables y que me dan mucho que pensar.
El trading está repleto de falsas verdades, comúnmente aceptadas, pero que no resisten ningún estudio serio y pormenorizado
Primero culpé a mi desconocimiento, luego a mis problemas de enfoque. Sin duda sigo sin saber muchas cosas, y sigo sin saber enfocar otras tantas, pero algo más falla y ya empiezo a considerar que está en el propio sustrato.
Lo voy a enunciar hoy claramente [una vez más] para que los puristas me lapiden públicamente, pero creo que en el trading [en general] está repleto de falsas verdades, comúnmente aceptadas, pero que no resisten ningún estudio serio y pormenorizado. El método científico, la lógica y algunos postulados del trading no parecen llevarse nada bien. Algunas falsas verdades que [y perdonen la brutal sinceridad] los traders de a pie seguimos como corderos camino del matadero.
Ya hace mucho que enuncié mi propia forma de trabajo: la del desaprendizaje. Está bien que todo el mundo considere que las cosas son así pero déjenme que, una vez las aprenda, las compruebe por mí mismo, por si acaso. Ese es un camino largo, penoso y tortuoso, pero que sin duda nos lleva a edificar siempre sobre cimientos más firmes que darlo todo por cierto simplemente porque alguien lo dijo hace 5 o 50 años en un libro o en una conferencia.
Aprendo para «desaprender«, para comprobar si las cosas son realmente así o sólo lo parecen, aunque lo parezcan por consenso muy mayoritario. Aunque lo parezcan por indiscutible tradición.
Les voy a poner sólo un ejemplo de a qué me refiero. Muchas veces, en el trading, algo se convierte en una verdad absoluta e indiscutible sólo porque quien lo dice ganó mucho dinero [o eso creemos] y explica en un libro que lo consiguió así [o eso dice él]. Esto es conocido dentro del mundo de la lógica como una Falacia Argumentum ad verecundiam o de «argumento de autoridad«, que se basa en defender algo con la única razón de que quien lo afirma tiene autoridad en la materia [en nuestro caso, porque ganó dinero].
Aprendo para «desaprender«, para comprobar si las cosas son realmente así o sólo lo parecen, aunque lo parezcan por consenso muy mayoritario. Aunque lo parezcan por indiscutible tradición.
Evidentemente, las cosas no son como son porque alguien lo diga, sino porque se demuestre realmente que lo son. Tampoco dejan de serlo porque quien lo diga sea un pelagatos, como yo. La Ciencia y la Filosofía tienen estas mismas reglas [lo siento] y si tuviera tiempo [y a alguien más interesase] intentaría demostrarlo con algunos ejemplos más.
La buena noticia [al menos para mí], es que algunas cosas en las que trabajo sí que encajan. O sea, que no creo que todo sea falso ni falaz.
Trabajo para arrojar las ideas contaminadas lejos de mis diseños y herramientas, aunque no siempre lo consiga. Quizás lo consiga o quizás no pero ¿qué voy a perder por intentar cometer mis propios errores en lugar de andar perpetuando los de otros?
El desafío es apasionante, enriquecedor y, si se consigue, oculta un premio magnífico. Y, si no, todo ese conocimiento será aplicable a otros desafíos profesionales.
¿Qué voy a perder por intentar cometer mis propios errores en lugar de andar perpetuando los de otros?
En este punto no se trata tanto de diseñar complicados algoritmos sino, simplemente, de separar el grano de la paja o, si lo prefieren, la señal del ruido.
El caso del bar “El Farol” es un problema planteado en el marco de la teoría matemática de juegos y de una aplicación en los mercados bursátiles tan evidente que no hará falta ni detallarla demasiado.
Esta es una de las razones que me impulsa a pensar que investigar nuevos métodos y herramientas de trading tiene matemáticamente sentido.
Se basa en una anécdota real acontecida en un bar de la ciudad de Santa Fe (Nuevo México) llamado “El Farol” y fue planteado inicialmente por el economista W. Brian Arthur en 1994.
El planteamiento del problema es el siguiente: En Santa Fe hay un número finito de personas. El jueves por la noche, todo el mundo desea ir al Bar “El Farol”. Sin embargo, “El Farol” es un local muy pequeño, y no resulta agradable si está demasiado lleno. Así pues, existen las siguientes “reglas” en el lugar:
Si menos del 60% de la población va a ir al bar, entonces es más divertido ir al bar que quedarse en casa.
Si más del 60% de la población va a ir al bar, entonces es menos divertido ir al bar que quedarse en casa.
Por desgracia, todo el mundo ha de decidir si ir o no ir al bar al mismo tiempo y no es posible saber por anticipado cuánta gente ha decidido ir.
La importancia del problema estriba en que no importa que método (determinista) siga cada persona para decidir que hacer: si todo el mundo usa el mismo método está garantizado que el método será inefectivo.
Si todo el mundo usa el mismo método y éste sugiere que el bar no estará lleno, entonces todo el mundo acudirá, por lo que el bar estará repleto. Del mismo modo, si todo el mundo usa el mismo método y éste sugiere que el bar estará repleto, entonces nadie acudirá y, por lo tanto, el bar estará vacío.
Lo mismo podemos aplicar a la gente que opta por un camino u otro para evitar el atasco. Si todos utilizan en mismo método de decisión, todos acudirán siempre a la misma calle y se colapsarán, mientras que la ruta alternativa estará vacía.
Si todo el mundo usa el mismo método (sea el que sea) está garantizado que el método será inefectivo.
Así pués, cuanto mayor sea el número de personas que utilicen un mismo método para tomar una determinada decisión [por ejemplo, de trading], por bueno que sea ese método, acabará con el Bar “El Farol” lleno o vacío [pánicos alcistas/bajistas o, coloquialmente, ‘calentones‘], pues todo el mundo tenderá a tomar la misma decisión de compra o venta en el mismo momento.
La disposición de distintos métodos deterministas ofrecerá una mejor operativa por el simple hecho de ser distintos. Si, además, su nivel de fiabilidad es bueno o equiparable, el resultado será mejor para todos pues [en el caso del trading] las posiciones y situación de mercado nos permitirán operar mejor. Lo más previsible es potencialmente menos eficiente.
Es una de las razones que me impulsa a pensar que investigar nuevos métodos [y nuevas herramientas] de trading tiene sentido, también matemáticamente.
Como soy de Ciencias, clasificar para mí es casi un vicio. Estaba buscando alguna manera de catalogar los diferentes tipos de traders amateurs que he conocido, ya sea personal o virtualmente, a lo largo de muchos-muchos años.
En un primer intento, acerté a dividir los traders [amateurs] que conozco por su actitud hacia el trading y, según ello, podrían clasificarse en dos grupos:
los que VAN hacia el trading, y
los que HUYEN hacia el trading; incluyendo en este último grupo los que ven en éste un recurso para abandonar situaciones laborales, económicas o personales que detestan.
Como ya comenté alguna vez, quizás no se trate de lo que necesitas, sino de lo que deseas. Quizás no se trate de lo que odias, sino de lo que quieres. Puedes huir hacia el trading, pero probablemente eso te costará disgustos y mucho dinero.
Evidentemente, los únicos que tienen una posibilidad de éxito son los del primer grupo, siempre que se planteen que se trata de una carrera de fondo larga y llena de obstáculos.
Puedes huir hacia el trading, pero probablemente eso te costará disgustos y mucho dinero.
Dentro de los traders activos, vi que podía hacer una segunda clasificación, en esta ocasión, por su método. Pero, una vez hecha, resultó que me parecía más clara por la vía del ejemplo, así que empezaré por ahí.
Imaginaros que sois el comandante de un ejército bárbaro. Desplegada frente a vosotros, al otro lado del valle, las temibles y casi invencibles legiones romanas. Soldados profesionales, disciplinados y bien entrenados.
Estudiemos quién lucha en nuestro bando. Por un lado, entonando fanáticos cantos religiosos, tenemos a los discípulos del chamán. Con total convencimiento en las promesas del brujo, se lanzarán contra el ejército romano a pecho descubierto porque CONFÍAN CIEGAMENTE en que sus conjuros los hará inmortales. Coincidiremos en que muchas posibilidades de supervivencia no tienen. De hecho, ninguna. Son los fans o seguidores.
El segundo grupo, está formado por una infantería de campesinos armados con espada. Han aprendido una finta, pero SÓLO UNA, y ya se creen soldados. Así que arremeten contra el primer soldado romano y, si tienen suerte, aplican la finta y salen victoriosos. Pero, aplican la misma finta con el segundo…, y con el tercero…, y con el cuarto… No hace falta tener dotes adivinatorias para saber que, más antes que después, encontrarán un soldado profesional que sepa replicar esa finta. Y, entonces ¿qué? Esos son los seguidores de patrón.
En el tercer grupo tenemos a soldados más expertos y veteranos, quizás supervivientes del grupo anterior. Ya vieron que para sobrevivir deberían conocer un buen número de fintas de ataque y defensa. Tienen una buena técnica y una buena táctica. Son capaces de superar a todos aquellos que les salen al paso, excepto a los mejores soldados profesionales con mayores habilidades. Contra esos no pueden aun conociendo muchas fintas. Les falta algo…
Por último están nuestras tropas de élite. Son los estrategas. Saben todo lo que adorna a los anteriores, pero son mejores que ellos porque aplican aquello que saben en la manera adecuada pues empiezan por estudiar al adversario. Con los adversarios grandes y fuertes, aplican la rapidez; con los pequeños y rápidos, la fuerza; contra los nerviosos, son pacientes; contra los asustadizos, son temibles; y, a los que son mejores que ellos, saben evitarlos. Son conscientes que se pueden perder batallas, porque lo que realmente importa es ganar las guerras. Y, sobre todo, volver de una pieza a casa.
Si ahora llevásemos todo esto al campo de los traders, el equivalente a estos grupos, serían:
Traders Tipo 1.- Los FANS, [Creyentes o Seguidores]:
Empiezo por ellos porque son los que más me enternecen. Están convencidos que los foros están repletos de expertos que ofrecen consejos gratuitos e ‘insiders‘ dispuestos de facilitarles a ellos información privilegiada. Acaban descubriendo que si alguien sabe algo más que ellos de cualquier materia, eso no lo convierte inmediatamente en “experto“. Con suerte algunos pasan al segundo grupo, que denomino:
Traders Tipo 2.- Los seguidores del PATRÓN:
Benditos ellos, todavía tienen una visión simplista del trading. Quieren y reclaman métodos simples, sin esfuerzo, sin matices ni interpretaciones. Si algo pasa [una vela de forma peculiar, la ruptura de una línea trazada sobre un gráfico, el cruce de una determinada media o una señal en un indicador] actúan sin más. Y cuando falla [todos los patrones tienen un elevado % de error] no entienden por qué, ni pierden tiempo en entenderlo. Se enfadan con el mundo, desisten de su uso y buscan otro nuevo patrón, y luego otro, y luego otro más…
Traders Tipo 3.- Los TÁCTICOS:
Estos ya merecen mayor respeto y consideración. Una táctica es, en términos generales, un método empleado con el fin de alcanzar un objetivo. Quizás empezaron como seguidores de patrones, pero llegó un punto en que se dieron cuenta que algo tan complejo no puede tener una solución TAN SIMPLE como un patrón o señal. Llegaron al convencimiento de que necesitaban una TÁCTICA, y empezaron a considerar que NO EXISTEN soluciones mágicas simples que sirvan para todos los momentos, todos los activos y todas las temporalidades, y que los desencadenantes pueden ser muchos y variables, por lo que necesitaban una TÁCTICA que COMBINASE diferentes señales y patrones, y probarla y perfeccionarla haciendo mucho papertrading, y perdiendo horas quizás para ajustarla a un sólo activo y una sola temporalidad. Pero cuando algo falla, como la han trabajado, intuyen el por qué y pueden ajustar o rectificar.
Algo tan complejo no puede tener una solución TAN SIMPLE como un patrón o señal
Tienen una TÁCTICA que les permite operar [o no hacerlo] según las circunstancias del mercado, sean las que sean. Uno puede diseñar su propia táctica o adquirirla de alguien, vía curso, libro o cualquier método de transmisión de conocimientos. Pero SIEMPRE ha de trabajarla hasta comprenderla e interiorizarla en todos sus detalles y extremos.
Traders Tipo 4.- Los ESTRATEGAS
Es una tribu extraña con pocos elementos, que no se contenta con encontrar una táctica razonable, sino que busca dentro de ella todos los por qué de sus éxitos y fracasos, y la combina con elementos de fondo, como el conocimiento de los Mercados, de la Operativa, de la Psicología y de la Gestión del Capital…
Para un estratega un cambio de táctica no es un fallo, sino que está incluido dentro de su estrategia
En el fondo son unos pesimistas/realistas convencidos que todas las estrategias, por completas que parezcan, son caducas en el tiempo y busca las fórmulas para encontrar la forma de aplicar en cada activo y mercado la estrategia adecuada en cada momento. Es decir, en su estrategia el cambio de táctica está incluido.
Buscan un conocimiento extenso que les permita liberarse de las limitaciones de las tácticas. Pero es un camino largo y tortuoso, sin una recompensa más o menos a medio plazo de los seguidores de las tácticas y sin el cortoplacismo de los seguidores de patrones. Es una especie de “celibato bursátil” que te lleva al cielo o a ningún lado, sin términos medios…
Pero, sobre todo, los estrategas son los que han aprendido, a base de tiempo y heridas, qué luchas rehuir y evitar. Miran mucho, y operan lo justo; sólo cuando las probabilidades parecen a su favor.
P.D.: Después de acabarlo, me he dado cuenta que este es uno de los post que más me ha costado escribir. Espero que, al menos, acabe mereciendo la pena. Es sólo un juego, una simple reflexión, pero mi deseo es que resulte de alguna utilidad [o, como mínimo, sea entretenido].
En este vídeo se muestra prácticamente cómo verificar una estrategia en ProRealTime sin necesidad de saber nada de programación. En esta ocasión comprobamos la eficiencia de dos estrategias simples con el indicador Blai5 ATLAS trabajando sobre DAX.