Etiqueta: Trading

Cuándo Cerrar un Paraguas

Cuándo Cerrar un Paraguas

Hoy les dedicaré una de esas entradas tontas que a veces se me ocurren. Esas que pocos aprecian porque sólo digo obviedades pero que, para mí, resultan útiles, precisamente para no olvidarlas.

Todos se esfuerzan en pronosticar qué pasará mañana, cuando lo único que importa es estar HOY en el lado correcto. Es como dedicar la mayor parte de nuestro tiempo y esfuerzo a pronosticar el tiempo futuro para después mojarse cuando llueve o resfriarse cuando refresca.

 Cuando llueve, no cierro nunca el paraguas antes de que deje de llover,  porque si lo cierro antes me mojaré hasta que realmente pare.

¿No es más lógico -simplemente- ver el tiempo que hace hoy y actuar en consecuencia? ¿Acaso hacen otra cosa habitualmente? ¿Necesitan saber imperiosamente 24 horas antes cuándo va a cambiar la meteorología para no verse del todo sorprendidos?

Yo, miro por la ventana y si llueve, tomo el paraguas. Y cuando llueve, no lo cierro nunca antes de que deje de llover del todo,  porque si lo cierro cuando pronostico que dejará de llover, mientras se cumple [o no] mi vaticinio, me quedaré como un pollo hasta que realmente pare. ¿Acaso sirve de algo o merece más mérito ser el primero en abrirlo o cerrarlo?

Lo dicho, una estupidez de post. Pura obviedad.

Pero espero que a algún trader ansioso le pueda ser de utilidad.

El Modelo TI en el Trading

El Modelo TI en el Trading

Cuando hace ya bastantes años llegué al mundo del trading, no pude por menos que observar algunos paralelismos entre la estructura del trading [del e-trading, para ser más exactos] y ciertas partes de la Teoría Matemática de la Información [TI] según el Modelo de Shannon/Weaver.

Para empezar, este es el modelo básico de comunicación según la TI:

Observemos que, según esta arquitectura básica, hay algunos conceptos que merecen especial atención. A un lado tenemos la Fuente de información (mercado) y, en el extremo opuesto estamos nosotros mismos, los traders, como receptores y destinatarios de la misma.

El eslabón intermedio de la cadena (Transmisor y Receptor), así como la codificación, son ahora mismo íntegramente por vía telemática y digital, gracias a la popularización de la red [el e-trading del que antes hablábamos].

Por último, tenemos un último factor que la TI ya contempla como fundamental: el Ruido, como elemento distorsionador interpuesto. Como pronto veremos, el ruido tiene en el trading (y desde este punto de vista metodológico) especial relevancia, así como diferentes orígenes y causas, algunas accidentales y otras claramente provocadas.

¿Información o Conocimiento?

¿Información o Conocimiento?

El hombre medio no desea que le digan si el mercado es alcista o bajista. Lo que desea es que le digan, de forma específica, qué valor comprar o vender. Quiere algo por nada. No desea trabajar. Ni siquiera desea pensar. 

Jesse Livermore

Cuando leí esta frase de Livermore, la verdad es que me pareció de lo más sensato y verídico que he leído jamás sobre mercados e inversores.

Llevo suficiente tiempo ya en el trading y en las redes sociales como para ser plenamente consciente que a la enorme mayoría de los traders les importa un rábano cualquier otra cosa que no sea que alguien les diga exactamente qué comprar hoy y qué vender mañana.

Curiosamente prefieren [he comprobado] seguir a un gurú que obtener beneficios. Con que les proporcione una buena operación de vez en cuando son capaces de perdonarle otras muchas equivocadas, incluso si el balance final es negativo. Al final he acabado pensando que, para el común de traders, puede más la pereza que la avaricia.

Si utilizas sólo la información, dependes completamente de tu fuente. De hecho, te entregas a ella. Si se extingue, te quedas huérfano. Si se contamina, la sigues hasta el infierno.

Ese cóctel de abulia y ambición desmedida les hace seguir a cualquiera que se ofrezca con tal de ahorrarse el trabajo de pensar y aprender. O quizás con la esperanza de poder echarle la culpa siempre a alguien y no a ellos mismos. Curiosamente la lista de voluntarios para convertirse en gurús de turno es prácticamente inagotable.

Imagino que la necesidad de ser alabados y encumbrados cuando aciertan pesa más que el inevitable y brutal linchamiento al que se verán sometidos por sus propios fanáticos seguidores cuando se equivoquen, que será más pronto que tarde.

Lo sé. El común de los traders quiere INFORMACIÓN y no CONOCIMIENTO.

El conocimiento se obtiene después de mucho tiempo y esfuerzo, en una búsqueda en muchas ocasiones personal con fracasos intermedios y una remota esperanza de triunfo final. La información, por contra, es inmediata y relativamente barata. En ocasiones, gratuita. Aunque eso no implique que sea veraz. Ni siquiera, útil, en muchos casos.

Lo sé. El común de los traders prefiere la INFORMACIÓN al CONOCIMIENTO.

El problema es que si utilizas sólo la información, dependes completamente de tu fuente. De hecho, te entregas a ella. Si se extingue, quedas huérfano. Si se contamina, la sigues hasta el infierno.

El conocimiento perdura. Comprende y se adapta. No se basa en ninguna situación, momento o fuente, sino en todos y en ninguno.

Los mercados me parecen una sofisticada maquinaria de generar información confusa. Si eres capaz de manejar algún pequeño matiz de su enrevesado funcionamiento, cualquier otro modelo de comunicación de datos parece pueril por lo simple.

Entre información y conocimiento, yo prefiero lo segundo, porque me es más útil y rentable, tanto a largo como a corto plazo. Además, no siempre las mayorías tienen razón, por abrumadoras que sean.

Los mercados me parecen una sofisticada maquinaria de generar información confusa.

Y, alguien se puede preguntar en justicia, si estás convencido de eso que dices, ¿por qué este blog? Pues porque de la gran mayoría de traders perezosos, prácticamente ninguno se pasará por aquí. Aquí todos nos obligamos a pensar y a ser críticos.

Pero, si TÚ si te has pasado, y has leído este post hasta el final, es porque también andas buscando conocimiento.

¿Ves? Escribirlo ha merecido la pena porque TÚ lo has leído. [Gracias por el RT]

Bienvenido, Ulises, a la larga travesía que, como dijo Kavafis:

"Pide que el camino sea largo.
Que muchas sean las mañanas de verano
en que llegues -¡con qué placer y alegría!-
a puertos nunca vistos antes".

El Trading y los Pilares del Karate-Do

El Trading y los Pilares del Karate-Do

Durante mucho tiempo, y dado en el sector tech en que trabajé años, me ha tocado hacer todo tipo de cursos y reciclajes. Incluso me tocó impartir más de uno.

Después de cursar unos de los últimos, hace algunos años, me planteaba en una de mis habituales desconexiones, en qué podía radicar la diferencia entre lo que podríamos llamar «formación tradicional» y la específica para el trading. ¿Son comparables?

En un curso de formación tradicional se muestran una serie de técnicas que, aplicadas en los casos apropiados, son siempre efectivas y obtienes unos resultados esperados. Son caminos directos y técnicas depuradas que te facilitan la vida y te ahorran trabajo. Nada que ver con tu estado de ánimo, ni con tu actitud psicológica ni con el azar de la situación del mercado. Funcionan siempre, twitée lo que twitée Trump.

Mi conclusión [entonces y ahora] es que, claramente, NO lo son. Me parece una tarea MUY difícil transmitir conocimientos en esta materia. Por eso, quizás, nunca me he sentido capaz ni de planteármelo y siempre muestro mi respeto por los formadores, porque [aunque seguro que de todo hay] intentarlo honestamente me parece tremendamente difícil y meritorio.

Lo seguí pensando un rato más y acabé llegando a la conclusión que lo que a mi juicio más se parecía a la enseñanza del trading podía ser la del karate. En mis años mozos me dediqué un tiempo a la práctica de ese arte marcial. Tuve una lesión larga y ya no volví a castigarme manos y pies contra el saco de arena. Eso que yo mismo me perdí…

Pero, a lo que íbamos, que era el posible paralelismo. El maestro o sensei empieza por enseñarnos los movimientos básicos, de golpe y esquiva, con manos y pies. Una y otra vez. Mil repeticiones hasta que consigues una técnica aceptable. Luego empiezas con los katas, una especie de danza-combate contra nadie, donde golpeas al aire una y otra vez, mientras te convences que estás luchando contra alguien o contra muchos al tiempo. Controlar tu fuerza, mantener tu equilibrio.

Cuando el maestro considera que estamos preparados, nos permite los primeros combates [kumite] contra compañeros de dojo de tu mismo nivel y peso y, si mejoramos mucho, incluso contra otros dojos o escuelas. Y así, muy poco a poco.

Supongo que en el aprendizaje del trading, casi más que en cualquier otra disciplina, se cumple la famosa regla de que el maestro sólo aparece cuando el alumno está preparado.

Ahora les explicaré cuál el camino habitual del trader como si de un aspirante a karateka se tratase.

Los más prudentes leen algunas cosas en Internet, leen en RR.SS. algunas bravuconadas de cinturones blancos o amarillos (o sea, novatos-pardillos, casi tanto como ellos) y se creen preparados para su primera competición. Se meten contra pesos pesados y duran dos segundos antes de caer noqueados en el primer combate contra el mercado.

Entonces se compran un libro o [si son listos] se apuntan a un dojo y se ponen en manos de un maestro. Acuden un par de veces, pero cuando ven que es cuestión de repetir los mismos aburridos movimientos mil una vez, les parece una pérdida de tiempo y lo de los katas una majadería. ¿Para qué andar pegando puñetazos al aire? Eso es para tontos danzarines, y ellos ya conocen las técnicas básicas y sienten preparados.

Se apuntan a su segunda competición, les pegan una segunda paliza y le echan toda la culpa al maestro porque –según ellos- no les enseñó bien.

¿Para qué andar pegando puñetazos al aire? Eso es para tontos danzarines, y ellos ya conocen las técnicas básicas y sienten preparados.

Y el mercado les da otra paliza

Si sobreviven y tienen suficiente cordura, volverán al dojo para que el maestro les enseñe los pilares básicos y fundamentos del karate-do, que no tienen nada que ver con romper ladrillos a puñetazos ni caminar por paredes, sino con el respeto, la justicia, la armonía y el esfuerzo, aderezados con la humildad, la modestia, la paciencia y otros muchas virtudes de este nivel, que hay que trabajar para conseguir.

Y, a partir de ahí, a repetir. Y repetir. Y sudar. Y perder. Y aceptarlo. Y volver a perder, y felicitar al rival. Y aprender de él. Y cuando se gana, hacerlo con humildad. Y respetar al rival. Y no creerse nunca mejor que nadie. El camino del karate-do no tiene fin y todos somos perpetuamente aprendices… Y yo también me reconozco ahora en algunas de estas situaciones haciendo el majadero, pegándome con pesos pesados y cayendo al tatami a la primera bofetada del mercado.

Supongo que en el aprendizaje del trading, casi más que en cualquier otra disciplina, se cumple la famosa regla de que el maestro sólo aparece cuando el alumno está preparado.

Repetir. Y repetir. Y sudar. Y perder. Y aceptarlo. Y volver a perder, y felicitar al rival. Y aprender de él. Y cuando se gana, hacerlo con humildad. Y respetar al rival. Y no creerse nunca mejor que nadie.

Sólo Para Traders 3.0

Sólo Para Traders 3.0

Es como si estuviese escuchando a la “brigada Talibán”, defensora de las esencias del trading tradicional desde hace cien años: “¡el tipo se ha vuelto loco! ¡Nunca pereció muy cuerdo, pero ahora ya ha perdido el poco juicio que parecía tener! Pero, ¿acaso pretende hacernos creer que para operar en los mercados hay que conocer de teorías del caos, sistemas complejos y funciones no lineales?”

Evidentemente que NO. Para operar en los mercados lo único que hace falta es comprar a un buen precio y vender a otro mejor. Sólo eso. La experiencia y la prudencia, ayudan; pero no se necesita mucho más.

Entonces, ¿para qué meternos en todas estas extrañas profundidades teóricas?

Para operar en los mercados lo único que hace falta es comprar a un buen precio y vender a otro mejor. Sólo eso.

En primer lugar, porque hace tiempo que algunos amigos me insistían en que lo pusiera por escrito; en segundo, porque no he descubierto en la “tradersfera” hispana documentación de este estilo, y me parecía una lástima, como si nadie se preocupase por ello, o como si a nadie le importase; y, en tercero, porque ahora me apetece hacerlo. Y probablemente durará hasta que vosotros, lectores, dejéis de interesaros o yo me canse y prefiera dedicarme a otra cosa. Lo que ocurra antes.

Como alguna vez expliqué, para mí el trading se parece mucho a un reloj clásico, de esos de bolsillo y con cadena. Por el lado de las manecillas, hay unas reglas sencillas y todos aprendemos de muy pequeños a leer las horas. Ahora estamos en el otro lado, el del mecanismo, intentando descubrir (hasta donde nos sea posible) cuales son los principios físicos y mecánicos bajo los que ese enjambre de ruedas, ruedecillas y muelles, funcionan, por grupos y en conjunto. Si a alguien no le apetece, que vuelva del lado de las manecillas, que incluso en esta misma web encontrará bastante de eso.

Mecanismo de Anticitera

Esto que sigue es SÓLO para vosotros, traders 3.0. Porque sois unos valientes y no os da miedo mirar a la complejidad a los ojos y desafiarla.

De todos modos sé [porque a muchos os conozco, y a otros os intuyo] que existe un grupo de traders que NO SE CONFORMAN [no nos conformamos] con explicaciones simplistas y trazos gruesos. Yo os llamo «traders 3.0» y sois aquellos que aspiran más al conocimiento que a la simple información. Que no nos creemos las explicaciones tradicionales y siempre queremos más. Esto que sigue es SÓLO para vosotros, que lo sepáis. Porque sois unos valientes y no os da miedo mirar a la complejidad a los ojos y desafiarla.

Pero como somos muchos más de los que creéis/creemos, estaría bien y sería de agradecer que, si os gusta el fondo y la forma de estos artículos, los impulsaseis a través de RT en las RR.SS. [hay unos bonitos botones al principio y final de todas las entradas para hacerlo], porque así ayudaréis a otros Traders 3.0 a descubrirlos y a seguir creciendo desde aquí. [Ya veis que este sitio web NO LLEVA PUBLICIDAD, sí que no hay clickbait oculto, simple afán de compartir y aportar].

Por si queréis echar un vistazo ordenado aquí tenéis un listado de los artículos que, por ahora, hemos dedicado al tema:

El Caos y la Hipótesis Tóxica

En el trading, el caos es toda la parte en blanco que hay a la derecha de la última vela dibujada.

Trading, Caos, Sistemas y una Mariposa

Todo problema se define y se resuelve descubriendo a qué tipo de sistema nos enfrentamos.

De Hormigas y Otras Variables

Allí estaban todas mis variables, en una danza caótica y de imposible cuantificación. Decenas de miles a la vista y quizás millones más dentro del hormiguero.

Violinistas Impacientes

Violinistas Impacientes

Uno tiene ya una edad y eso, a pesar de todo, tiene algunas ventajas. Ando por los cincuenta-y-muchos, y eso también forma parte de mi patrimonio. Reconozco que ahora soy más paciente y menos impetuoso de lo que lo era. Empiezo menos cosas, pero acabo muchas más.

Esto viene a cuento de algunos emails que me llegan de forma más o menos intermitente desde hace años. Por lo general, los usuarios [cada cual en su estilo] son muy amables y empiezan por agradecerme que ponga mis herramientas a su disposición.

Reconozco que ahora soy más paciente y menos impetuoso de lo que lo era. Empiezo menos cosas, pero acabo muchas más.

Pero también hay algunos que me comentan que acababan de empezar en el trading y “en un mes, o mes y medio” habrían probado de diseñar sistemas con tal o cual de mis indicadores sin gran éxito, o que no acaban de descubrir esa “señal o cruce mágico” que por lo visto esperaban encontrar en tal o cual de ellos, y que les «garantice» un porcentaje de acierto cercano a la infalibilidad. A veces se muestran decepcionados, aunque está claro que la decepción sólo es proporcional a las expectativas de cada cual.  

Os confieso que la gestión de este (y otros) tipo de correos es desigual y depende del día, de mi carga de trabajo y de mi estado de ánimo. A veces contesto y a veces no [mucho mejor cuando NO]. Sobre todo si vuelvo a leer la parte en que dicen que «en un mes o mes y medio«, recuerdo los AÑOS que llevo yo en la porfía.

Así que, aprovechando que hoy estoy de lo más calmado y paternal, escribiré este post y cuando reciba de nuevo ese tipo de mails, los remitiré aquí.

Pensad por un momento que soy un artesano constructor de violines o guitarras. Nadie puede pensar que por tener un violín (incluso un BUEN violín), va a conseguir al instante melodías embriagadoras, si antes no sabe algo de música.

Para eso hacen falta años de práctica y de solfeo. En «mes o mes y medio«, yo apostaría a que lo normal es que no consiga nada más que asustar y enloquecer a todo el vecindario con gruñidos y chirridos estridentes.

Nadie puede pensar que por tener un violín (incluso un BUEN violín), va a conseguir al instante melodías embriagadoras, si antes no sabe algo de música.

No creo que haya NADA hay en mis indicadores para que puedan considerarse ni una panacea infalible, ni un «santo grial» ni un atajo para un trading 100% eficiente.

Sólo son nuevos indicadores técnicos que, en manos de un buen trader que se los haga suyos, pueden mejorar sus resultados. Incluso, por encima de la media. Pero eso es mérito del trader, pues sabe sacar buen provecho a la herramienta.

En manos de un BUEN trader que se los haga suyos, pueden mejorar sus resultados. Pero eso es mérito del trader, que sabe sacar buen provecho a la herramienta.

Por eso se da la paradoja que la mayor parte de elogios los recibo de los traders y analistas más expertos, para sorpresa y desconcierto de muchos novatos. La razón es clara: ellos son buenos “músicos” capaces de sacarle buena música a mis instrumentos…, y a casi todos las demás.

Hace falta más de un mes o un mes y medio para saber tocar el cello así…

Hay que aprender música en lugar de cambiar constantemente de instrumento buscando uno que toque solo. Que si suena la flauta, seguramente será por casualidad…

Un Patrón, una Táctica o una Estrategia

Un Patrón, una Táctica o una Estrategia

Como soy de Ciencias, clasificar para mí es casi un vicio. Estaba buscando alguna manera de catalogar los diferentes tipos de traders amateurs que he conocido, ya sea personal o virtualmente, a lo largo de muchos-muchos años.

En un primer intento, acerté a dividir los traders [amateurs] que conozco por su actitud hacia el trading y, según ello, podrían clasificarse en dos grupos:

  • los que VAN hacia el trading, y
  • los que HUYEN hacia el trading; incluyendo en este último grupo los que ven en éste un recurso para abandonar situaciones laborales, económicas o personales que detestan.

Como ya comenté alguna vez, quizás no se trate de lo que necesitas, sino de lo que deseas. Quizás no se trate de lo que odias, sino de lo que quieres. Puedes huir hacia el trading, pero probablemente eso te costará disgustos y mucho dinero.

Evidentemente, los únicos que tienen una posibilidad de éxito son los del primer grupo, siempre que se planteen que se trata de una carrera de fondo larga y llena de obstáculos.

Puedes huir hacia el trading, pero probablemente eso te costará disgustos y mucho dinero.

Dentro de los traders activos, vi que podía hacer una segunda clasificación, en esta ocasión, por su método. Pero, una vez hecha, resultó que me parecía más clara por la vía del ejemplo, así que empezaré por ahí.

Imaginaros que sois el comandante de un ejército bárbaro. Desplegada frente a vosotros, al otro lado del valle, las temibles y casi invencibles legiones romanas. Soldados profesionales, disciplinados y bien entrenados.

Estudiemos quién lucha en nuestro bando. Por un lado, entonando fanáticos cantos religiosos, tenemos a los discípulos del chamán. Con total convencimiento en las promesas del brujo, se lanzarán contra el ejército romano a pecho descubierto porque CONFÍAN CIEGAMENTE en que sus conjuros los hará inmortales. Coincidiremos en que muchas posibilidades de supervivencia no tienen. De hecho, ninguna. Son los fans o seguidores.

El segundo grupo, está formado por una infantería de campesinos armados con espada. Han aprendido una finta, pero SÓLO UNA, y ya se creen soldados. Así que arremeten contra el primer soldado romano y, si tienen suerte, aplican la finta y salen victoriosos. Pero, aplican la misma finta con el segundo…, y con el tercero…, y con el cuarto… No hace falta tener dotes adivinatorias para saber que, más antes que después, encontrarán un soldado profesional que sepa replicar esa finta. Y, entonces ¿qué? Esos son los seguidores de patrón.

En el tercer grupo tenemos a soldados más expertos y veteranos, quizás supervivientes del grupo anterior. Ya vieron que para sobrevivir deberían conocer un buen número de fintas de ataque y defensa. Tienen una buena técnica y una buena táctica. Son capaces de superar a todos aquellos que les salen al paso, excepto a los mejores soldados profesionales con mayores habilidades. Contra esos no pueden aun conociendo muchas fintas. Les falta algo…

Por último están nuestras tropas de élite. Son los estrategas. Saben todo lo que adorna a los anteriores, pero son mejores que ellos porque aplican aquello que saben en la manera adecuada pues empiezan por estudiar al adversario. Con los adversarios grandes y fuertes, aplican la rapidez; con los pequeños y rápidos, la fuerza; contra los nerviosos, son pacientes; contra los asustadizos, son temibles; y, a los que son mejores que ellos, saben evitarlos. Son conscientes que se pueden perder batallas, porque lo que realmente  importa es ganar las guerras. Y, sobre todo, volver de una pieza a casa.


Si ahora llevásemos todo esto al campo de los traders, el equivalente a estos grupos, serían:

Traders Tipo 1.-  Los FANS, [Creyentes o Seguidores]:

Empiezo por ellos porque son los que más me enternecen. Están convencidos que los foros están repletos de expertos que ofrecen consejos gratuitos e ‘insiders‘ dispuestos de facilitarles a ellos información privilegiada. Acaban descubriendo que si alguien sabe algo más que ellos de cualquier materia, eso no lo convierte inmediatamente en “experto“. Con suerte algunos pasan al segundo grupo, que denomino:

Traders Tipo 2.- Los seguidores del PATRÓN:

Benditos ellos, todavía tienen una visión simplista del trading. Quieren y reclaman métodos simples, sin esfuerzo, sin matices ni interpretaciones. Si algo pasa [una vela de forma peculiar, la ruptura de una línea trazada sobre un gráfico, el cruce de una determinada media o una señal en un indicador] actúan sin más. Y cuando falla [todos los patrones tienen un elevado % de error] no entienden por qué, ni pierden tiempo en entenderlo. Se enfadan con el mundo, desisten de su uso y buscan otro nuevo patrón, y luego otro, y luego otro más…

Traders Tipo 3.- Los TÁCTICOS:

Estos ya merecen mayor respeto y consideración. Una táctica es, en términos generales, un método empleado con el fin de alcanzar un objetivo. Quizás empezaron como seguidores de patrones, pero llegó un punto en que se dieron cuenta que algo tan complejo no puede tener una solución TAN SIMPLE como un patrón o señal. Llegaron al convencimiento de que necesitaban una TÁCTICA, y empezaron a considerar que NO EXISTEN soluciones mágicas simples que sirvan para todos los momentos, todos los activos y todas las temporalidades, y que los desencadenantes pueden ser muchos y variables, por lo que necesitaban una TÁCTICA que COMBINASE diferentes señales y patrones, y probarla y perfeccionarla haciendo mucho papertrading, y perdiendo horas quizás para ajustarla a un sólo activo y una sola temporalidad. Pero cuando algo falla, como la han trabajado, intuyen el por qué y pueden ajustar o rectificar.

Algo tan complejo no puede tener una solución TAN SIMPLE como un patrón o señal

Tienen una TÁCTICA que les permite operar [o no hacerlo] según las circunstancias del mercado, sean las que sean. Uno puede diseñar su propia táctica o adquirirla de alguien, vía curso, libro o cualquier método de transmisión de conocimientos. Pero SIEMPRE ha de trabajarla hasta comprenderla e interiorizarla en todos sus detalles y extremos.

Traders Tipo 4.- Los ESTRATEGAS

Es una tribu extraña con pocos elementos, que no se contenta con encontrar una táctica razonable, sino que busca dentro de ella todos los por qué de sus éxitos y fracasos, y la combina con elementos de fondo, como el conocimiento de los Mercados, de la Operativa, de la Psicología y de la Gestión del Capital…

Para un estratega un cambio de táctica no es un fallo, sino que está incluido dentro de su estrategia

En el fondo son unos pesimistas/realistas convencidos que todas las estrategias, por completas que parezcan, son caducas en el tiempo y busca las fórmulas para encontrar la forma de aplicar en cada activo y mercado la estrategia adecuada en cada momento. Es decir, en su estrategia el cambio de táctica está incluido.

Buscan un conocimiento extenso que les permita liberarse de las limitaciones de las tácticas. Pero es un camino largo y tortuoso, sin una recompensa más o menos a medio plazo de los seguidores de las tácticas y sin el cortoplacismo de los seguidores de patrones. Es una especie de “celibato bursátil” que te lleva al cielo o a ningún lado, sin términos medios…

Pero, sobre todo, los estrategas son los que han aprendido, a base de tiempo y heridas, qué luchas rehuir y evitar. Miran mucho, y operan lo justo; sólo cuando las probabilidades parecen a su favor.

P.D.: Después de acabarlo, me he dado cuenta que este es uno de los post que más me ha costado escribir. Espero que, al menos, acabe mereciendo la pena. Es sólo un juego, una simple reflexión, pero mi deseo es que resulte de alguna utilidad [o, como mínimo, sea entretenido].

La Información Que Falta

La Información Que Falta

En general obtenemos información de los datos presentes. Los identificamos, los clasificamos, los procesamos y extraemos conclusiones en forma de gráficos.

Pero, muchas veces olvidamos que también podemos obtener información de los datos que, en cada contexto, deberían estar presentes y NO lo están. Estaríamos hablando de obtener información «por defecto». Por ausencia de datos que deberían estar presentes.

En un entorno tan variable y ruidoso como el de el flujo de datos de los mercados, es interesante tenerlo presente y observar tanto lo que podríamos considerar como estructuras de datos comunes o patrones como sus alteraciones gráficas, generalmente debidas a deficiencias en datos.

Determinados déficits de datos en situaciones tipo pueden ser TAN significativos como los propios patrones y, en ocasiones, ocasionan situaciones completamente opuestas.

Como en un sudoku, la resolución viene de la componente entre los datos presentes y los ausentes; lo que hay y lo que NO, pero debería estar.

Traders Que Pierden y Traders Que Mienten

Traders Que Pierden y Traders Que Mienten

Lo confieso: hace unos días me pillé un rebote monumental. El mes me estaba yendo bastante bien. He compartido con ustedes algunas de mis operaciones [incluso antes de emprenderlas] y aquí quedaron escritas así que no temo que me tomen por mentiroso.

Pero una de mis apuestas internacionales del mes abrió de golpe con un gap del -4% que fue ampliándose a lo largo de la jornada hasta más de un -9%. Abrió mucho más allá de mi prudente stop de protección y, como sucede bastante a menudo en estos casos de gap, el stop no saltó hasta mucho más tarde, Dios sabe por qué. Total, lo que tantos esfuerzos y operaciones nos cuesta de arrebatarle al mercado y sumarlo en nuestra cuenta, el mercado lo recupera en mayor o menor medida brutalmente y de un solo plumazo. Adiós al 75% de los beneficios mensuales en cuestión de un ratito.

Hay dos tipos de traders: los confiesan que pierden a menudo y los que mienten

Ya ven, tod@s los traders de a pie [o sea, tú, yo y TOD@S los demás], sufrimos reveses, a veces merecidos, a veces no tanto.

Ahí es cuando recuerdas el viejo adagio bursátil que dice que hay dos tipos de traders: los confiesan que pierden a menudo y los que mienten. Apúntenme entre los primeros.

Con el cabreo, empiezas a generar bilis… ¿No sería mejor poner mi dinero a plazo y dejar de romperme el coco y de llevarme disgustos?

Afortunadamente, soy un lector insaciable y, ya saben, el azar muchas veces pone en tus manos el texto que necesitas en cada momento. Así que, cuando tengas el bajón puedes hacer dos cosas: o te lo replanteas y te abres una cartilla a plazo de las de toda la vida, o recupera este post y lee a partir de este punto.

Una vez le preguntaron a Michael Jordan, el más grande jugador de básquet de todos los tiempos y uno de los mejores deportistas de la historia sobre las claves de su éxito [sí, realmente la pregunta no era muy original]. Pero esta vez la respuesta superó cualquier expectativa.

El alero de los Chicago Bulls contestó: “He fallado más de 9.000 tiros en mi carrera, y he perdido casi 300 juegos. Veintiséis veces, me confiaron lanzar el tiro decisivo que ganaba del partido, y lo fallé. He fallado una y otra y otra vez en mi vida. Creo que es por eso por lo que, al final, he acabado teniendo éxito”.

Y ahora, si me lo permiten, me voy a estudiar un rato por qué invertí en algo que estaba a punto de perder casi un 10% en un solo día para que no me vuelva a pasar en mucho-mucho tiempo.

Tres Cosas Que Un Trader Debería Saber (y III): Trading, Fantasy y Analytics

Tres Cosas Que Un Trader Debería Saber (y III): Trading, Fantasy y Analytics

Previas:


– “Muy bien. Voy a solucionar este problema”, -dije yo.

 – “¿Y quién te dice que ese problema tiene solución? ¿Y quién te dice que es un problema ÚNICO y no complejo? Y, en caso de que sea un solo problema, ¿quién te dice que tiene UNA SOLA solución y no varias?”

 Y así mi profesor me enseñó a tener siempre la mente abierta ante todas las posibilidades.

Reconozco que los libros de trading no son mi lectura favorita. En general tienen estructura de manuales y, como tales, habitualmente son tan escasamente apasionantes como es previsible. Y en la categoría de “manuales” sí que me ha tocado “perpetrar” algunos por los que merecería condenación eterna.

Afortunadamente algunos por algunas partes sí que merecen el esfuerzo de leerlos. Hoy me referiré a uno de ellos, concretamente al muy recomendable “Leones contra Gacelas” de J. L. Cárpatos.

Un capítulo llamó poderosamente mi atención. Se encuentra en la primera parte del libro, titulada genéricamente “Algo de Filosofía” y más concretamente, dentro de ella, el capítulo se titula “Juguemos al blackjack”.

Reconozco que he vuelto a estudiar ese capítulo en más de una ocasión porque, más allá de mi interés en ese juego concreto de cartas (que es nulo), sí que me permitía entender el concepto general de enfoque del trading que propone el autor como un problema probabilístico, donde el azar va disminuyendo en tanto en cuanto las cartas (datos) van apareciendo sobre la mesa. El jugador dispone de una estrategia general que aplica y ajusta a cada situación. Un buen ejemplo de teoría de juegos, que diríamos hoy desde un punto de vista matemático.

Me pareció que, si era capaz de entender que ese “problema” denominado trading (que vimos antes que NO sabemos si tiene alguna solución, solo una, o multitud de ellas) admitía ese tipo de estrategia vía ejemplo, yo debería ser capaz de explicar mi propio enfoque “orientado al dato” con alguna otra analogía, también de juego.

3.1 – Trading vs. Fantasy & Analytics

Excuso explicar la estrategia aplicada al juego del blackjack, precisamente porque está detallada en el libro y capítulo antes mencionado, y jamás podré hacerlo mejor de lo que está allí expuesto.

Así que, pensando en un ejemplo parecido que me permitiese explicar cómo oriento yo tanto mi trading como el diseño de mis herramientas, algoritmos, indicadores o sistemas automáticos, se me ocurrió hablarles de las Fantasy, un juego que seguro es conocido por muchos en sus diferentes formas, nombres y variantes, aunque jamás lo he visto relacionado con el mundo del trading. Hoy lo haremos.

Yo sólo me voy a referir al único que conozco y juego, que es el Fantasy de NFL.com de football americano.

Un vez más, mi aproximación a este deporte, como en el propio caso del trading, fue puramente accidental y por el lado más inesperado: el de mi interés por los datos.

Hace algunos años un par de locos revolucionarios introdujeron la gestión de los datos deportivos en una experiencia que los apasionados por el tema conocemos como Analytics que incluso generó una película (Moneyball). Esa fue una de las primeras aplicaciones de Big Data real que empezó en el baseball, con resultados realmente sorprendentes.

Y, de ahí, la recopilación y aplicación de datos estadísticos sobre el juego y los jugadores saltó rápidamente al football profesional y a la NFL. Y, en ese punto y momento me interesé yo. Hoy en día se ha extendido a la gestión de prácticamente todos los deportes profesionales.

No voy a entrar en muchos detalles ni sobre el football americano ni propiamente sobre la Fantasy como tal, porque no me considero ningún experto y hay bastante documentación al respecto, pero hoy es uno de los juegos con más éxito en medio mundo con millones de jugadores esperando que se inicie cada temporada NFL, no tanto por seguir la propia competición, sino por poder jugar su Fantasy.

Cada propietario de un equipo Fantasy escoge entre todos los jugadores activos en la liga (NFL, en este caso) un grupo limitado de jugadores, en una especie de selección personal. Debe escoger jugadores en cada posición y de su actuación personal en cada partido acumulan puntos. Deberá decidir quién es titular o reserva e, incluso, puede dar altas o bajas en su equipo cada semana y sustituir a lesionados o jugadores que no están cumpliendo con sus expectativas. (Actualmente ya existen juegos denominados «managers» con la misma óptica y aplicados a deportes más próximos, que cuando escribí el artículo eran todavía una rareza).

Cada jornada tu equipo se enfrenta contra el equipo Fantasy de otro propietario en una liga generalmente compuesta por 10, obteniendo victorias o derrotas y jugando una competición liguera.

3.2 – ¿En qué se parece una Fantasy al Data-Trading?

Vamos ahora a establecer paralelismos.

Para empezar, las primeras decisiones que corresponden al propietario de una Fantasy es la propia selección de los jugadores que compondrán su equipo. Es el equivalente de adquirir una CARTERA.

Sabemos que estamos obligados a disponer de un mínimo de jugadores en cada una de las posiciones (diversificación). Esto nos da libertad de crear con libertad carteras/equipos, aunque acabaremos llegando a la conclusión que lo correcto (y lo que ofrece mejores resultados) son las carteras/equipos equilibrados.

El sistema habitual de selección es el denominado draft: una especie de sorteo donde se escogen por turno cualquiera de los jugadores disponibles. Los jugadores se ordenan por los RESULTADOS obtenidos en anteriores temporadas, o por sus expectativas estadísticas si son nuevos en la liga, o por nuestros criterios personales.

Pero ahí, nuevamente, tenemos un nuevo paralelismo: un jugador/activo cotizado (empresa) puede tener unos buenos datos históricos, pero con eso no basta porque también deberemos tener en cuenta en qué equipo/sector económico, se encuadra. La situación del equipo/sector puede afectar de manera significativa las prestaciones de cada jugador/activo.

Un jugador medio en un buen equipo seguramente se beneficiará de ello, tanto como se beneficia un activo de estar en un sector en alza. Cambiar de equipo a uno mejor o que el equipo se haya reforzado adecuadamente puede incrementar sustancialmente las expectativas de cada jugador, o viceversa.

Así los jugadores/activos y sus equipos/sectores están interrelacionados y son variables que hay que re-evaluar cada temporada.

Debemos tener en cuenta las estadísticas individuales del jugador/activo, así como del equipo/sector en que se encuadra. Ver si se trata de emergentes con posibilidades o son blue chips contrastados. Si su tendencia es alcista o están en declive (individual o sectorial).

«¿Cómo vas a obtener resultados diferentes si haces siempre lo mismo?”.

A. Einstein

Y, todo ello deberemos decidirlo únicamente basándonos en el conjunto de estadísticas disponibles.

El juego admite diferentes estrategias. Por mencionar sólo tres:

  • muchos propietarios toman un conjunto de jugadores (cartera) y la mantienen durante todo el campeonato, pase lo que pase y hasta el final (buy & hold);
  • otros mantienen una gestión activa de sus equipos/carteras sustituyendo, por ejemplo, aquellos jugadores/activos lesionados de larga duración o los que no responden a sus expectativas (swing); y,
  • acabando con aquellos propietarios que prácticamente cada semana realizan cambios en la composición de su equipo, buscando disponer de los jugadores/activos con un mejor rendimiento actual, semana a semana (scalp).

3.3 – Estadísticas convencionales vs. estadísticas avanzadas

Evidentemente me dejo un millón de aspectos interesantes a comentar, paralelismos evidentes entre el trading y este juego, pero allí dónde tienen la amabilidad de invitarme a hablar, intento aprovechar la oportunidad para intentar diferenciar entre herramientas de trading convencionales y avanzadas, y la ventaja diferencial que nos ofrecen estas últimas. La Fantasy también es un excelente ejemplo para explicarlo.

Las webs de las distintas Fantasy ofrecen una auténtica montaña de datos tanto individuales como colectivos para ayudar a escoger los mejores jugadores/activos por posición. Unos apuestan por los consagrados, otros por los emergentes, y muchos por una combinación entre ambos.

Pero el tipo de datos que nos ofrecen son los que podríamos llamar “convencionales”: yardas de pase, de carrera, de recepción, intentos, etc.

Hace algún tiempo dentro de las denominadas genéricamente Analytics empezaron a prosperar un nuevo tipo de estadísticas que denominamos en genérico “avanzadas” y que permiten obtener nuevas valoraciones sobre los mismos jugadores y/o equipos.

Voy a poner sólo algunos ejemplos. Imaginemos que en las estadísticas convencionales dos receptores han obtenido el mismo número de yardas de recepción en una temporada. ¿Cuál de los dos elegir?

Quizás uno de los dos ha necesitado el doble de recepciones que el otro. Eso puede querer decir que quizás jugó la mitad de partidos, o la mitad del tiempo, o erró la mitad de los pases que se le enviaron, o que su pasador no le envía buenos balones. Cualquiera de esos casos, si está contabilizado, permitiría tomar una mejor decisión al ofrecer información adicional.

No es lo mismo recibir 100 pases de 1 yarda (cortitos y fáciles) o recibir pases más largos y cerca de la zona de marca, donde la presión y los marcajes son mucho más duros y completar un pase es mucho más complicado. Además, el receptor capaz de conseguir capturas cerca de la red zone probablemente hará más marcas y obtendrá mejor puntuación en nuestra Fantasy, aun estableciendo el mismo número de yardas totales de pase.

NADIE (ni en trading, ni en una Fantasy) puede adivinar el futuro y ha de gestionar azar, incertidumbre y posibilidades estadísticas.

De hecho existen webs (algunas de pago), que ya ofrecen este tipo de estadísticas avanzadas que permiten tomar decisiones sobre qué jugadores y/o equipos resultan una mejor elección u ofrecen mejores prestaciones atendiendo a un mayor número de variables.

Para observar la diferencia, puede visitar alguna de estas webs como www.profootballfocus.com o www.footballoutsiders.com para observar este tipo de estadísticas complejas y la forma de realizarlas.

Evidentemente la Fantasy no deja de ser un inocente juego y este tipo de webs estadísticas un entretenimiento. Pero también (por todo lo explicado) resultan una fuente inagotable de ideas y una divertida forma de experimentar con carteras, activos, datos y aleatoriedad porque después, cada domingo, salta la sorpresa y NADIE (ni en trading, ni en una Fantasy) puede adivinar el futuro y ha de gestionar azar, incertidumbre y posibilidades estadísticas.

Porque, como decía Einstein, “¿cómo vas a obtener resultados diferentes si haces siempre lo mismo?”.


4.- A MODO DE CONCLUSIÓN

De hecho, si hubiera escrito este artículo mínimamente bien, este capítulo de conclusiones sería completamente accesorio e innecesario.

Desde el principio la voluntad es que todo fuera muy socrático. Y ello debería significar que, planteando las preguntas adecuadas (o, mejor, dejando que te las plantees y respondas tú), deberíamos todos llegar a conclusiones parecidas.

Por mucho que haya un consenso general sobre cualquier aspecto, una nueva forma de abordar un problema puede dar con una mejor solución

Desgraciadamente hoy en día no es este el método más habitual para la transmisión de ideas.

En general (y en el mundo del trading, especialmente) la comunicación es jerárquica: alguien se erige en autoridad y dicta SU verdad a quien le escucha o lee. Quien la recibe la acepta sin atreverse a cuestionarla, pues ello podría causar un conflicto de autoridad.

Y aquí acaba el proceso hasta que llega el siguiente maestro a explicar su propia verdad personal, una vez más, como si fuera la única.

Así que, si tú ya has sacado tus propias conclusiones, no te dejes confundir por las mías. Déjalo aquí y gracias por tu atención.

El trading puede ser abordado de distintas formas, formas antiguas, nuevas o una combinación de ambas. Y todas merecen respeto

Si, por lo que sea, prefieres mi resumen y conclusión, que es de hecho la explicación de mi punto de vista sobre el trading y la razón del diseño de mis algoritmos, me bastan con una pocas líneas más:

  1. (El TEST)  Para hacer trading con éxito NO NECESITAS ADIVINAR el futuro (ni ninguna «técnica» para hacerlo). Entre otras cosas porque NADIE puede adivinar el futuro, por lo que esa es una pretensión condenada al fracaso.

Basta con gestionar el presente. Para hacerlo podemos AYUDARNOS en los datos del pasado, pero esos datos NO IMPLICAN qué pasará en el próximo tic. En gestión de datos SÓLO establecemos niveles de probabilidad de los distintos posibles escenarios.

El trading es como una partida de ajedrez: NO hay que ADIVINAR el siguiente movimiento del adversario, basta con tener previstos los más probables.

Y, si te equivocas, rectificas.

2.(La ÚLCERA) Por mucho que haya un consenso general sobre cualquier aspecto, una nueva forma de abordar un problema puede dar con una solución mejor. Conservar lo que merezca ser conservado y revisar el resto es la forma de avanzar en cualquier campo del conocimiento. Yo creo que en el trading, también.   

3.(FANTASY) Lo importante de esta última entrega está al principio. Entender que un determinado problema tiene UNA SOLA solución y que esa es (además) la nuestra es, cuando menos, pecado de soberbia

El trading puede ser abordado de distintas formas, formas antiguas, nuevas o una mezcla de ambas. Y todas merecen respeto, aunque cada cual debería elegir aquellas en las que cree, sea por convencimiento personal o por fe.

Yo prefiero las más racionales y más propias del siglo XXI, pero esa es mi elección. Y eso es lo que he pretendido explicar. Hasta este punto.

Gracias por la paciencia de llegar hasta aquí.